Carlos Serpa Maceira
Periodista Independiente
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La Habana , 26 de junio._ El descontento y malestar se encuentran al orden del día en la población de Cuba, debido al reajuste que realiza el régimen comunista a la canasta básica de alimentos que vende a la población de la isla.
La canasta básica de alimentos vendidos a través de la libreta de racionamiento, incluyen pequeñas cantidades de pasta, arroz, granos, grasa, azúcar, pescado y pollo.
“Estos alimentos no alcanzan para vivir, no se entiende el recorte que realiza el gobierno”, opinó Fredesvinda González, una octogenaria residente en el municipio la Habana Vieja.
El gobierno castrista vincula sus problemas económicos a la crisis internacional y al embargo norteamericano. Pero la población, lo achacan a la ineficiencia que caracteriza al Estado.
“Los platos rotos de los problemas estructurales de la economía, la incapacidad e ineficiencia lo pagan la crisis internacional y el embargo de Estados Unidos, para el gobierno tiene que existir un culpable que eso”, enfatizó Maidelia Martínez una ama de casa residente en la barriada de Cayo Hueso, municipio Centro Habana.
El gobierno está reajustando la canasta básica de alimentos, tratando de preservar un consumo diario de 3,100 kilocalorías. “En el plan de consumo que estamos diseñando en términos de alimentación, el estimado está en el orden de 3,100 kilocalorías, cuando la recomendación diaria es de 2,400”, dijo el ministro de economía Marino Murillo al diario oficial Juventud Rebelde.
Según datos oficiales, el 80 por ciento de los alimentos son importados, la isla gasta más de $2,800 millones anuales de dólares en compra de comestibles en mercados de Europa, Asia y Estados Unidos.
“El país no puede sacar más del bolsillo de lo que entra, la capacidad inversionista puede decrecer, y de hecho ya la estamos reduciendo conscientemente porque hay que concentrarse en lo imprescindible”, señaló Julio Vázquez Roque, viceministro de Economía.
Los alimentos que les son vendidos a los cubanos por la canasta no les alcanza, y por otra parte los productos que se comercializan en forma liberada sus precios son altos.
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